«HASTA LUEGO»
Una vez fui joven y quise transmitir la emoción y el sentimiento que encierran las palabras. Por eso elegí ser profesor. Fue difícil ser consecuente con lo que enseñaba pero eso hizo fascinante la tarea. Traté de dar y a veces recibí más de lo que entregaba. Traté de enseñar y aprendí que no todo es blanco o negro, que nadie es bueno o malo porque sí, que la VERDAD no existe y que sólo el respeto, el cariño y el afecto enseñan realmente. Que una palmada en el hombro, una mirada indulgente produce mejor efecto que el reproche.
Seguramente me equivoqué muchas veces: lo sé y lo siento. Y pido disculpas a todos aquellos que sufrieron mis iras y malos momentos.
Hoy doy por cerrada una etapa de mi vida, la más importante seguramente, durante la que he conocido compañeros maravillosos que son, sin embargo, amigos.
Echaré de menos el aula que ya siempre veré vacía pero en mi mente conservaré el recuerdo de todos aquellos que fuisteis alumnos y compañeros, muy queridos.
¡¡¡¡¡GRACIAS!!!!! Y…. HASTA LUEGO.
Jose Retortillo